Demasiadas personas sufren abusos sexuales, acoso, agresiones y violaciones en la escuela, el trabajo, el hogar y nuestras comunidades, tanto en persona como en línea. Con demasiada frecuencia, este daño se da dentro de la pareja.

Aunque cualquiera puede ser objeto de violencia sexual, los prejuicios y la discriminación basados en el género y la sexualidad conducen a tasas mucho más elevadas de violencia sexual dirigida a mujeres, niñas y personas LGBTQIA+ y no binarias.

Tenemos el poder de transformar historias de violencia sexual, violencia doméstica y violencia de pareja del mañana en historias de seguridad.

Podemos hacerlo al hablar y actuar de modo de modos que signifiquen un cambio en las normas que excusan, pasan por alto o minimizan la violencia sexual y el profundo daño que causa. Para lograr este tipo de cambio, se necesita que las personas de todas las edades y condiciones sociales:

• Estén atentos y comprendan cómo son, cómo suenan y cómo se siente un comportamiento sexual seguro y no seguro;
• Sean conscientes del daño que se produce cuando se violenta el bienestar sexual de alguien de cualquier forma y por cualquier motivo;
• Adquieran habilidades para hacerse cargo de su propia seguridad emocional y física y de la de los demás: y,
• Adquieran habilidades para expresar y retirar el consentimiento, establecer y mantener límites y respetar los límites de los demás.

Nuestro Centro de Aprendizaje Online, talleres online en vivo y nuestros recursos proporcionan a los líderes de comunidades, escuelas, lugares de trabajo, hogares y otros grupos, las herramientas y estrategias para construir estas habilidades, y de este modo, prevenir la violencia sexual y los daños que ocasiona.